El corazón es contrario a la mente,
pero juntos, pueden hacer milagros.
Pueden hacerte volar, soñar, reír, disfrutar...
Caer, desilusionarte, llorar, sufrir...
Pueden hacer que estés en un abismo de felicidad,
que ni tú logras creértelo, pueden hacer que estés tan
hundido en la miseria que no sabes cómo salir.
Sólo hay una cosa de lo que nunca
te podrás escapar, y son los sentimientos.
Sentimientos que te harán feliz o te harán
emergirte en la tristeza...
Sentimientos tan profundos que son incontrolables.
Sentimientos que quieras o no, estarán ahí.
Sentimientos de los que ni tú, ni nadie,
podrá escapar jamás.
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